En palabras de la Dra. Sylvia Asenjo cae
perfectamente el apelativo de pandemia a esta enfermedad. Lo curioso, es que no
es necesariamente transmisible, si bien juega un papel importante la obesidad
de una madre que incide en la del hijo/a, es más bien una consecuencia de la
sociedad en que vivimos.
Desde sus áreas - la pediatría y la
epidemiología-, comentó sobre el estado del arte en la materia, las causas de
esta enfermedad y los planes de acción para disminuir la población afectada.
La ingesta excesiva de grasa, azúcar y sal,
tiene a más de 1.500 millones de
personas mayores de 20 años con sus índices de masa corporal (IMC) por sobre
25, es decir, con sobrepeso, relató la Dra. Asenjo. Y no ayuda que en nuestro
país un 88,7% de la población adulta sea sedentaria.
El aumento del sobrepeso en la población
infantil y sobre todo en las zonas urbanas de menores recursos derivó en un
interesante debate entre los asistentes y la Dra. Asenjo. En un estudio
realizado a la población menor de edad en Concepción y Coronel, se descubrió
que un 9,2% padecía obesidad y un 17%
sobrepeso. La muestra consideró a 25 mil niños y adolescentes de 10 a 18 años.
“Nuestros indicadores
son muy similares a los países desarrollados, por lo tanto, tenemos ciertas patologías ligadas
a la obesidad en común, como las enfermedades cardiovasculares, cáncer de mama,
cáncer de colon, cáncer de endometrio, cirrosis no alcohólica, apnea del sueño
y problemas sicológicos. Además, la diabetes tipo II se ve doblemente
favorecida de aparecer en el organismo” explicó la doctora. “Incluso, podría desarrollarse el síndrome
metabólico, que es la aparición simultánea de al menos 3 enfermedades
relacionadas con la obesidad”.
La audiencia conoció algunos de los planes
aplicados a la zona, como el EGO (Estrategia Global contra la Obesidad). Uno de
los nuevos, acreditado por la Universidad de Yale, es impulsado por la Dra
Asenjo y se imparte en el sector Centinela
de Talcahuano.
Las preguntas se centraron en indagar
más sobre factores genéticos, el cáncer de endometrio, la alimentación
adecuada, la relación de la obesidad con patologías tiroideas, los factores
culturales, y los detalles del plan impartido en Talcahuano, entre otras
preguntas durante cuarenta minutos en donde todos pudimos disfrutar del café.
¿Qué le pareció la
recepción del público?
Dra. Asenjo: Me pareció un público muy
acogedor, muy participativo e interesado. Para mí fue muy agradable, porque uno
siempre le toca participar en ambientes que están más restringidos a lo que uno
habitualmente hace, y para mí es tremendamente importante hablar de este tema
en un ambiente que se aleja de eso y que se integra más con el público general,
desde distintas disciplinas. Fue muy satisfactorio.
¿Cuál es el desafío
que usted prevé para las futuras generaciones?
A: El desafío es primeramente
personal, de hacernos cargo de este problema. Yo pienso que hay un desafío en
el ambiente en el que uno se mueve, en su familia, pero también en sus
distintos aspectos del mundo laboral. Siempre uno puede contribuir a que
nuestro mundo sea mejor y vivamos de mejor manera. Porque aquí hay un factor
ambiental y cultural, importante y eso
tiene un efecto multiplicador a la larga.
Impresiones de algunos asistentes
“A mí me gustó. El tema es importante para
todos. Me aclaró dudas sobre el cáncer de endometrio, lo que preguntó una
persona del público. Fue muy interesante que se mezclaran todos los puntos de
vista de los que estábamos”. Nicolás
Inostroza, estudiante de Nutrición y
Dietética, Inacap.
“Me pareció súper buena. Se vieron distintos
puntos de vista, lo que nos ayuda a completar toda la información que ya
teníamos de antes. Más por cultura general y una vida sana es que me gusta venir
a los cafés”. Benjamín Guzmán, biólogo y
estudiante de postgrado UdeC.
0 comentarios
Posts a comment